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Thu, Mar

El pasado lunes 23 de julio, en la ciudad de Corrientes, Argentina, celebramos la Eucaristía junto al grupo de jóvenes “Discípulos del Maestro”, acompañado por la comunidad de Discípulas del Divino Maestro presente en dicha ciudad. Uno de los motivos centrales de la Misa fue la conmemoración de los 100 años de la muerte de nuestro hermano aspirante Mayorino Vigolungo, cuya figura se dio a conocer en la celebración y en un encuentro posterior en la misma comunidad.

La eucaristía fue presidida por el P. Juan Guouman, quien además celebró con los chicos sus 25 años de ordenación sacerdotal, mientras, quien suscribe, presentó la figura del joven Mayorino, destacando los ideales de vida de un muchacho como ellos, que fue santificando su vida en la oración, el estudio, el apostolado, la amistad y a través de su programa de vida: “Progresar un poquito cada día”.

Terminada la celebración, se presentaron algunos videos y se reflexionó en torno a la vida de Mayorino teniendo como inspiración la Palabra de Dios, con el pasaje evangélico de la multiplicación de los panes (Jn 6, 9): Mayorino fue como aquel muchacho, que dio sus cinco panes y dos peces, entregando su vida por el apostolado paulino. Luego se hizo un conversatorio con los presentes y se compartió una merienda en la que no faltó el tradicional mate, signo de fraternidad y amistad en países como la Argentina.

En la ciudad de Corrientes, al noreste del país, las Hnas. Discípulas acompañan a los jóvenes en su día a día, también en el discernimiento vocacional, en consonancia con la Iglesia local; en más de una ocasión, nos han abierto las puertas de su comunidad para colaborar con este mismo apostolado.

Que el pequeño Mayorino interceda por las vocaciones también en esta ciudad, donde muchos jóvenes se plantean el ideal vocacional.